Al igual que el diafragma, el obturador de una cámara es un componente esencial en la fotografía. Muchos proyectos creativos ajustan la velocidad de obturación para lograr el efecto deseado.
Considerando que algunas fotografías dependen directamente del tiempo de exposición a la luz, es importante comprender cómo funciona el obturador de una cámara fotográfica, así sabrás qué tipos de obturadores hay, además de los ajustes necesarios.
Contenidos
Qué es el obturador de una cámara
El obturador de una cámara regula la luz que pasa por el sensor del equipo, al igual que el diafragma, pero en este caso controla el tiempo de exposición. Un elemento fundamental.
Está ubicado delante del sensor, su función es controlar el tiempo por el cual la luz va a pasar por este.
Se forma de dos cortinillas que se abren y cierran al iniciar o finalizar la exposición. Y es precisamente el espacio que queda entre cada una, el canal por donde entrará la luz.
Tipos de obturadores
Entre los tipos de obturadores fotográficos están:
Obturador de lámina simple
Este obturador también se conoce como de hoja simple. Consiste en la unión de una o varias hojas de metal que, generalmente, no permiten que la luz pase a través del objetivo y pueda llegar a la película.
Cuando se activa la apertura del obturador se mueven las hojas que descubren el lente del objetivo. Así, dura el tiempo necesario para la exposición y luego se cierra.
Obturador central
Este elemento se ubica justo en el centro del objetivo. Se compone por diversas láminas de material metálico que ejercen su función abriendo de manera radial. Desde el momento que se acciona el disparador, dichas láminas se van separando del centro.
La mencionada posición se mantiene hasta que transcurra el periodo de exposición que se establezca previamente. Algunos obturadores centrales suelen trabajar de manera mecánica. No obstante, existen otros que tienen más precisión y que se controlan de forma electrónica.
Con el paso de los años, los expertos en fotografía usan cada vez menos el obturador central. Debido a que, las cámaras modernas y novedosas lo incorporan en los objetivos.
Obturador plano focal
Para este caso, el elemento se ubica por dentro de la cámara fotográfica. La mayoría de los equipos lo tienen delante del sensor. Se conforma de dos cortinillas que son elaboradas con una aleación ultraligera. Ejercen movimientos que son controlados por la electrónica del equipo.
Estas cortinillas se desplazan verticalmente. Cuando se efectúa el primer disparo, comienza el movimiento de la primera cortinilla. Este proceso es importante, ya que es el que permite el paso de la luz.
Después de transcurrido el tiempo para la exposición, se desliza la segunda cortinilla. Siendo esta la encargada de envolver nuevamente el área. Ambos elementos utilizan el mismo tiempo para abrir o cerrar por completo el sensor.
Para ajustar los periodos de exposición se deben acordar los tiempos en que transcurre la apertura de la primera cortinilla y la suspensión de la segunda. Así, si se establecen parámetros largos de unos 1/250 segundos (o más), surgirán inconvenientes, ya que la segunda cortinilla no se desplazaría hasta que la segunda no termine su recorrido.
Lo ideal es que para que los tiempos de exposición sean más breves se necesitaría que la segunda se desplace antes de que la primera termine su proceso. De esta manera, se garantiza que el sensor no se exponga por completo.
¿Cuáles son las velocidades de obturación?
Entendiendo que la velocidad de obturación es el tiempo en que el sensor se expone a la luz, debemos conocer los números estándar de las velocidades para la obturación. Serían los siguientes:
1/1000, 1/500, 1/250, 1/125, 1/60, 1/30, 1/15, 1/8, 1/4, 1/2, 1
Por ejemplo, cada paso es señal de la mitad o el doble de luz. Es decir, el valor 1/15 permite más de la mitad de luz que 1/30. Así como 1/60 es la cuarta parte de lo que transmite 1/15.
Ajuste de velocidades
Para controlar las velocidades de obturación se ajusta mediante una rueda o control giratorio. Casi siempre se ubica en el área superior de la cámara. De esta forma, seleccionar la velocidad de obturación será mucho más sencillo.
Si quieres que el proceso sea más dinámico, puedes suprimir el numerador de las velocidades a un segundo. Así que la escala quedaría de la siguiente manera:
4000 / 2000 / 1000 / 500 / 250 / 125 / 60 / 30 / 15 / 8 / 4 / 2 / 1 / B
Con relación a la posición B, en esta elección se deja abierto por completo el obturador. Por lo tanto, al hacer esto dejas pasar toda la luz desde el momento que se mantiene pulsado la tecla de disparo.
Es muy común usar este parámetro en zonas muy oscuras, bien sea para lograr efectos especiales o para fotografías nocturnas.
Dial de obturación
Las cámaras de alta gama réflex incorporan un dial especial para el control de la velocidad de obturación. Los de baja gama utilizan un dial compartido, este se utiliza para cambiar la velocidad de obturación y la apertura del diafragma.
Con el control electrónico que posee el obturador, los tiempos de exposición pueden disminuirse o ampliarse. En este sentido, en la tabla a continuación se muestran escalas de velocidades de obturación con incrementos de 1/3 de paso. Este punto es el más tradicional aplicado en las cámaras réflex de hoy en día.
Escala de velocidades de obturación con incrementos de 1/3 de EV:
- 1/8000, 1/6400, 1/5000, 1/4000, 1/3200, 1/2500, 1/2000, 1/1600, 1/1250, 1/1000
- 1/800, 1/640, 1/500, 1/400, 1/320, 1/250, 1/200, 1/160, 1/125, 1/100
- 1/80, 1/60, 1/50, 1/40, 1/30, 1/25, 1/20, 1/15, 1/13, 1/10
- 1/8, 1/6, 1/5, 1/4, 1/3, 1/2,5, 1/2, 1/0,6, 1/0,3, 1.
Velocidades de sincronización en el flash
Producto la corta duración de los destellos de un flash, es conveniente que el obturador, en ocasiones, esté completamente abierto. Con ello se logra que la exposición al sensor sea realizada correctamente.
A esta medida de obturación rápida se le conoce como velocidad de sincronización en el flash. Se trata de unos parámetros específicos, por medio del cual es posible disparar la cámara con el sensor completamente descubierto.
La mayoría de los equipos fotográficos antiguos cuentan con 35 mm y las cortinillas del obturador suelen desplazarse de forma horizontal. Asimismo, la velocidad en que efectúa la sincronización está entre los 1/60 o menores rangos.
Por su parte, las cámaras actuales con réflex son al contrario y dichas cortinillas hacen el proceso de manera vertical. Siendo para estas la velocidad para sincronizar de 1/125 o 1/250. En el caso de que estos valores estén por encima del rango el destello de flash del sensor podría estar expuesto parcialmente.
Vibraciones de la cámara
Cuando realizas fotografías, sin ningún soporte plano como un trípode, debes elegir una velocidad de obturación suficientemente rápida. Recuerda que debes siempre evitar que las vibraciones puedan influir en la nitidez de las fotografías.
Mientras mayor sea la distancia focal del objetivo, es más probable que se obtengan imágenes de poca calidad, producto de los movimientos inesperados de la cámara. ¿Quieres evitar que esto ocurra? Pues lo recomendado es usar velocidades de obturación mínimas.
Veamos un ejemplo: un teleobjetivo de 200 mm requiere una mínima velocidad, alrededor de 1/200 segundos. Este número pudiera ser más lento cuando el equipo dispone de un sistema especial para la estabilización de la foto.
Velocidades de obturación, según la ocasión
La velocidad de obturación va a depender del panorama a fotografiar, además de los elementos que acompañan la escena. Aquí es importante saber identificar las velocidades típicas para usar en cada momento, y es con la práctica que lograrás el efecto deseado.
Entre las temáticas más usadas, donde es conveniente saber la velocidad de obturación, tenemos:
Deportes
En esta categoría es recomendable el uso de velocidades rápidas. Un buen ejemplo es cuando un atleta hace una jugada única y la idea es capturar ese momento importante, en todo su esplendor.
Para congelar ese movimiento, se necesita adaptación. Todo va a depender del tipo de deporte a fotografiar, ya que en algunas disciplinas conviene usar una velocidad rápida, como en las carreras de motos, o una lenta en los partidos de tenis.
Fauna
Esta temática sigue la misma línea que los deportes. Y, como sabemos, son eventos impredecibles, un pájaro puede atrapar a su presa en un instante, así que aquí las velocidades rápidas son las recomendadas.
No obstante, todo va a depender de la escena, en algunos casos se necesitarán velocidades lentas.
Efecto de agua o seda
Aquí vemos el típico movimiento de las nubes o el efecto seda de agua. En este caso, lo recomendable es usar velocidades de obturación lentas, la idea es captar el movimiento que dibuja el efecto del agua o la técnica del barrido.
Una vez que congelemos el objetivo en un entorno en movimiento, el efecto será muy atractivo. La recomendación es de unos 1/60 segundos.
Zooming
Con esta técnica logramos dar la sensación de movimiento. La recomendación es utilizar velocidades lentas, con diafragma cerrado, que dure el tiempo en el que el obturador está abierto, y con distancia focal del objetivo variable.
Light Painting
Este efecto, también llamado luz en movimiento, requiere de tiempos de exposición largos y velocidades lentas para que se pueda registrar el trazo de la luz. En algunos casos se puede variar la velocidad, dependiendo de las escenas y el efecto buscado.
Imágenes nocturnas
Las velocidades de obturación recomendadas para estas fotografías son las lentas, es muy importante que la luz entre al sensor.
Efecto “paso del tiempo”
Para lograr este efecto, combinamos lugares estáticos y sujetos móviles. En este caso, la recomendación es la velocidad lenta, de esta forma conseguiremos un entorno estático.
¿Qué tipo de obturador elegir?
Los puntos fuertes y débiles podrán depender del tipo de obturador. Por ejemplo, puede que los obturadores mecánicos sean algo ruidosos, mientras que el electrónico es completamente silencioso.
Por otro lado, es muy común que en los obturadores mecánicos ocurra una pérdida leve de nitidez o del difuminado. Esto es debido a los movimientos producidos por el obturador.
El obturador mecánico genera menos distorsión que la producida por el electrónico. Ocurre mayormente en el momento que se realizan fotografías de elementos que presentan movimientos de gran rapidez.
Los obturadores electrónicos provocan una ráfaga de disparos de gran magnitud, ya que este tipo de equipos no requieren mucho movimientos de piezas físicas.
La mayoría de las cámaras sin espejo tienen parámetros que superan los 10 fps. Pero las de tipo réflex que dan uso a los obturadores electrónicos, que muy difícilmente pueden llegar a superar dicho número.